Paremos el tiempo.
Parémoslo ahora, mientras todavía no hemos aprendido a soportarnos.
Mientras aún no nos odiamos a ratos.
Cuando seguimos descubriendo, cada día, cosas nuevas el uno del otro. Y nos encanta.
En este instante, en el que todavía no ha llegado la costumbre.
Que no nos hemos herido o, al menos, no conscientemente.
Paremos el tiempo ahora.
Parémoslo en el momento justo en el que tenemos seguridad en el otro.
Ahora que hay confianza.
Ahora que aún no la hemos roto.
Una vez leí un libro que comenzaba con...
Hay veces que lo veo de pronto y me...
Hoy quiero hablar del tabú que supone la realidad de que no todos los padres quieren a sus hijos o, incluso, de que existen padres que odian a sus hijos, los utilizan y los machacan para su propio beneficio o egolatría.
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¿Y ahora qué coño hacemos con los niños?
La literatura puede ser espesa, barroca, intrincada y demostrar el obnubilante ingenio del un creador de mundos.
O puede ser simple, directa y transparente.
Es brillante, en serio, muchas felicidades. Tropezamos tantas veces en las mismas piedras, en plural, que no está de más recordar lo importante que es frenar de vez en cuando. Y si es con poesía, mejor.
Y me gusta más aún porque el mismo día publiqué una entrada titulada “Tiempo muerto”, que también habla de amor, aunque no de este tipo de amor…
Un saludo.
¡Muchas gracias por tu comentario! Bueno, no considero que eso sea poesía, pero hay ciertos temas que, imagino, se escriben solos.
¡Un saludo! 🙂
Hoy sí has encontrado a Casiopea.
¿Te puedes creer que me ha costado pillarlo? Es por lo del tiempo y eso… ¿no? 😂😂
¡Claro! y esos extraños cigarros y tal 😛
Jajajajajajaja 🤪